La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (USDA) publicó recientemente un comunicado de prensa sobre los peligros de los cannabinoides sintéticos, como la marihuana sintética conocida más comúnmente como “Spice” y “K2”. Muchos de estos productos han sido contaminados con brodifacoum, que es un anticoagulante de acción muy prolongada que se usa comúnmente en el veneno para ratas.
La FDA está trabajando con la Agencia Antidrogas (DEA) para hacer de los cannabinoides sintéticos una sustancia controlada para evitar un “peligro inminente para el público” (FDA, 2018). Los productos no aprobados se venden en tiendas de conveniencia y gasolineras como sustitutos de la marihuana. Estos productos son tóxicos y pueden provocar taquicardia, vómitos, agitación, confusión, pensamientos suicidas, aumento de la presión arterial, disminución del suministro de sangre al corazón, daño renal, convulsiones, alucinaciones e incluso la muerte.
La FDA recomienda que las personas que posiblemente hayan consumido productos de marihuana sintética estén atentas a los signos de sangrado. Estos incluyen moretones fáciles, encías supurantes y hemorragias nasales. Las personas que experimenten estos síntomas después de consumir productos de marihuana sintética deben buscar atención médica de inmediato, ya que los efectos del brodifacoum son tratables. Aquellos que ya toman medicamentos recetados o de venta libre para afecciones preexistentes pueden tener un mayor riesgo de sufrir hemorragias.
Además de que los usuarios corren el riesgo de sufrir problemas médicos graves, a la FDA también le preocupa que el suministro de sangre de EE. UU. esté contaminado con brodifacoum. Las personas que usan materiales sintéticos con brodifacoum y donan sangre, en última instancia, hacen más daño que bien. Debido a su larga vida media, el riesgo de hemorragia por brodifacoum, que impide que la vitamina K se reutilice en el cuerpo, puede persistir durante semanas. En consecuencia, existen posibles preocupaciones de seguridad tanto para el donante de sangre como para los componentes sanguíneos donados, dado el posible impacto en la coagulación.
La FDA insta a las personas a evitar el uso de cannabinoides sintéticos, especialmente porque no hay forma de saber qué productos han sido contaminados con brodifacoum.
Fuentes: 1, 2